¡Feliz Navidad!

Queridos amigos,

Según el Ocultismo, cada fin de año, en torno a estas fechas, en preparación del momento trascendental del Solsticio de Invierno, cuando el sol queda parado, y antes de emprender su gloriosa ascensión, hay lo que se llama la gran purga del año, la gran purificación por el Fuego Divino, que es el Fuego de la Divina Compasión y Misericordia.

En tal momento solemne, el Logos da la orden para lo que se ha de lograr a lo largo del año siguiente, en la noche del 21 de diciembre. Dicha orden alcanza en el acto a la Mónada, por Navidad desciende al Ego y a fin de año llega a la personalidad.

Son enseñanzas que se han repetido infinidad de veces y que, por lo mismo, se han olvidado también innumerables veces. Sin embargo, no está de más recordarlas para acostumbrarnos a sintonizar nuestro ser interno con esa orden dada en tal fecha y así aprovechar nuestra disposición para una renovación interna verdadera. Cada año, en su infinita misericordia, el Logos nos brinda la oportunidad de dar un paso hacia adelante, de reforzar nuestra aspiración de una vida superior y espiritual y avanzar en nuestra marcha hacia la transformación interna, con el fin de colaborar en la medida de nuestras posibilidades con el plan de dios.

Que estas reflexiones sirvan para que en estas fechas esté presente en nuestro ser interno esa purificación y ese renacer del espíritu crístico en cada uno de los seres que formamos la humanidad, con toda su compasión y misericordia.

Paz a Todos los Seres

A.T.B.